Jumping - La rana saltarina by José Luis Ganim

A José lo conocí como a muchos otros amigos artesanos cuando me contactó por algún tema referido a la construcción de señuelos. El hecho de estar en la misma ciudad y relativamente cerca hizo que construyamos una relación fluida tanto en los medios de comunicación como en persona. 

Uno de sus primeros trabajos suyo me lo regaló. Se trata de un paseante de superficie con forma de tarucha, con muchísimo laburo y lleno de detalles. Lo puse en mi caja de pesca y lo llevé en mi siguiente excursión pero a pesar de mis esfuerzos no logré que se moviera de ninguna manera. El paseante era un fracaso y, sinceridad ante todo, le tenía que comunica la mala nueva al novel artesano!!...  lejos de amilanarse redobló sus esfuerzos. En poco tiempo se notaron las mejoras en sus trabajos, tanto en natación como en terminaciones, hasta volverse un obsesivo del movimiento de las maderas talladas en el agua.

Hace un tiempo que lo veo trabajando con esmero en los jumping, señuelo que genera mas de una discusión en el ambiente de artesanos en torno a las posibilidades técnicas de que salten solos sin la necesidad de darles acción con la puntera de la caña. Lo cierto es que ha logrado no solo fabricarlos, sino también elaborar una teoría muy interesante que es lo que con mucha generosidad nos acerca en esta oportunidad.

Debo decir que he probado y he visto estos jumping artesanales trabajando y es notable como, bien calibrados, tienen una natación impecable, así que se me ocurrió que el aporte de José sumaría mucho para esta comunidad que no para de crecer.

Sin mas palabras les presento el trabajo de José Luis Ganim.

Gracias Amigo por semejante aporte!

Gracias a todos por seguir usando este espacio!

Buena Pesca!

Jumping - Ranita Saltarina por José Luis Ganim


En esta oportunidad, para la cartera de la dama y la caja señuelera del caballero, presentamos un señuelo artesanal de sencilla fabricación, y que como contrapartida, posee muy buenas prestación, resulta muy atractivo para el pez, y más importante aún, peca!

Es un artificial ideal para tararira, de escasos cinco centímetros  y su principal característica es la de ir dando pequeños saltitos continuos sobre la superficie a la simple tracción, lo que lo torna muy tentador para las hoplias.  

Como veremos en el paso a paso procedente, este artificio es muy fácil de construir. Surge de una talla simplona, sin vericuetos, y que solo merece un poco de atención en el equilibrio de contrapesado y flotabilidad, tema que profundizaremos más tarde.

De lograr dicho equilibrio, obtendremos un señuelo de gran versatilidad, en tanto se presenta en un principio como antienganche, aunque se adapta muy bien a canchas de agua limpia. Por otro lado destaca por su funcionalidad. En canchas vegetadas, posee una acción de saltitos continuos y erráticos a la simple tracción lenta. En aguas despejadas, combinando diferentes velocidades y formas de tracción, podemos hacer que salte, que popee o que actúe como crank de superficie

Este señuelo artesanal nació de la experimentación. Es la cruza entre las promocionadas jumping frog o ranas tailandesas, tan mentadas en internet, y un diseño propio fortuito... En plena etapa de pre-fabricación, tallé varios prototipos de diferentes formas geométricas, algunos fielmente copiados y otros de diseño propio; este que les presento a continuación es el que mejor funcionó de todos, el que más fielmente se adaptó a la consigna de rana saltarina y, curiosamente, surgió del reciclaje de una talla fracasada... cosas que pasan...


Todo muy lindo pero el poncho no aparece!

Comenzamos con la sucesión de etapas constructivas. Como dicho proceso no se aparta ni un ápice de otros señuelos presentados en este blog, no creo necesario redundar en este aspecto, por lo tanto avanzaremos de forma sencilla y rápida.

Tomamos un taco de madera, en este caso haremos dos, uno en cedro y otro en kiri, mucho más liviano. Usted tome la madera que tenga a mano, incluido el palo de la escoba.


Mediante el uso de una plantilla de cartón, que surgió de copiar el señuelo exitoso, contorneamos la silueta del futuro señuelo en la madera. Con la ayuda de una sierra de metal (es lo que tengo a mano) cortamos y aproximamos los bordes. Cuanto más nos ajustemos a los contornos, menos trabajo tendremos después con la trincheta

Adjunto además una plantilla de la silueta como para poder bajarla e imprimir a escala 

A continuación, mediante el uso de un elemento cortante, en mi caso una trincheta común, tallamos la silueta bien pegados al contorno y luego procedemos a darle tres dimensiones, primero con la ayuda de un lápiz y luego con el elemento filoso ya presentado. En esta etapa el tallado es rústico, pero ya debemos ir escuadrando simétricamente el señuelo.

 Empleando un tallado más fino y sutil, redondeamos las aristas y vamos dándole la forma definitiva al cuerpo del artesanal. Cuanto más preciso sea este desbastado a trincheta, menos tendremos que lijar. 

Tips: personalmente me sirve de gran ayuda al tallar figuras cónicas o redondeadas en general, marcar un centro longitudinal en el lomo. De esta forma conseguiremos escuadrar el señuelo con mayor facilidad y precisión 

Ahora si, a lijar. Con lija no-past grano 80 y paciencia, emparejamos la talla y, en caso de ser necesario, corregimos la simetría. Es muy importante que en esta etapa el artesanal quede perfectamente simétrico, caso contrario ya casi no hay vuelta atrás en lo sucesivo.

Con tal fin podemos emplear el famoso "ojímetro" de Telmo, o una simple hoja de papel con renglones, donde ubicaremos  un eje y centraremos la talla por comparación.

Ya con la talla perfectamente simétrica y lijada, procederemos a colocar el alma de acero para los tomas. Con un fragmento de hoja de sierra hacemos un corte longitudinal para alojar el alma de alambre. En este caso, atento a que él toma de línea irá en el extremo superior, es recomendable hacer el corte por el lomo y no por el vientre, ahorrando tiempo (fotos 17,18).

Con alambre de odontología de 0.8 milímetros formaremos un alma con sólo dos tomas, uno de línea adelante y otro para el anzuelo en la cola. Como detalle: es conveniente formar la toma de cola unos milímetros más larga y enroscar el alambre excedente sobre sí mismo, formando de esta manera un pequeño soporte, que más adelante nos facilitará atar la cola de goma correspondiente. Fijamos el alma rellenando con la fórmula mágica de gotita-bicarbonato. 

Tips: al rellenar, conviene aplicar con un leve exceso, pues es más fácil lijar el excedente que andar tapando pequeñas fisuras a posteriori. Ya que va a hacer un buen enchastre de gotita y bicarbonato, hágalo una sola vez! 

Con lija 80 emprolijamos el sector de corte y rellenado (Fotos 19,20). 

Proseguimos con la inserción del contrapeso. Y acá surge la primera polémica: he visto en Internet, tanto en vídeos y páginas especializadas como en foros de artesanos nacionales; opiniones muy disimiles con respecto al lugar donde alojar el plomo y la cantidad del mismo... Esta polémica, en lo personal, queda zanjada simplemente por haber experimentado un proceso previo de prueba y error,  tampoco hablamos de física cuántica…  Por lo tanto,  ubico el contrapeso donde me dio resultados positivos. Por supuesto esto no excluye que funcione con otras teorías, sólo me guío por mi experiencia y con el aval de Stephen Hawking.

Para ubicar el plomo, dividimos imaginariamente el vientre de la futura rana en tres partes, y marcamos un punto en el primer tercio contando de cola a cabeza. Perforamos con taladro o simplemente con un elemento puntiagudo. La cantidad de plomo es a ojo, en este caso le ponemos un poco más al de kiri que es más liviano que el cedro. Con la ayuda de una pinza modelamos el plomo y lo insertamos a martillazo limpio. Rellenamos con la consabida fórmula mágica y emprolijamos con lija 80. (Fotos 21 ,22 ,23, 24, 25, 26, 27,).

Tips: en este caso particular, el contrapeso no es para hundir un sector del señuelo sino, atento a que el toma de línea está en el extremo superior de la boca, es para evitar que el artificio se gire y trabaje "panza arriba". Por lo tanto prestar mucha atención al agujerear e introducir el plomo, tratar de que éste quede junto a la superficie de la panza, puesto que si se hunde y se va al centro de la talla, desequilibrara el señuelo y lo hará nadar al revés 

Acto seguido empieza la etapa de emprolijar. Con lija 220 se repasa la talla y se enmasilla. En este caso, masilla roja rebajada 50 y 50 con thinner sello de oro (preparar y guardar en un frasco tapa a rosca). Se aplican dos manos por inmersión y se deja secar unas horas. Para lograr una superficie lisa y pulida, se lija con no - past 400 o lija al agua del mismo grano, yo prefiero la primera pues hace menos enchastre y se consiguen mejores resultados en menos tiempo de lijado.

Pintura y  montaje final

 "El montaje final es muy curioso, es en verdad realmente entretenido..." rezan los Redondos desde "ji ji ji".  Y nunca más aplicable que en este caso... 

Viene la etapa más linda y entretenida... Si usted señor artesano, o aspirante a serlo, transitó todo el camino, cortó, talló, lijó, luchó con alambre y masilla, se encuentra en la gatera para el proceso final, la pintura y el montaje de "SU" artesanal... 

Es en este momento en que el señuelo cobra vida. Deja de ser un pedazo de madera, cirujeado vaya a saber dónde, y se transforma en un artificial de pesca, con aciertos y desprolijidades... pero al fin y al cabo un señuelo de pesca! Y hecho por sus manos!

 Pero ojo! No por ser la última es la etapa más fácil ni mucho menos...

 Sobre el señuelo ya masillado y lijado a grano 400, le aplicamos varias manos de acrílico al agua blanco para lograr un buen fondo. Podemos hacerle unas berruguitas con Laca Dimensional.

 Luego pintamos con los colores que se nos antojen, empleando pincel o aerógrafo. Para terminar entre tres y cinco manos de laca por inmersión.

Mientras seca el laqueado, procederemos a armar la cola o pollera, el otro aspecto clave, junto con el contrapeso, para el funcionamiento del artesanal.

Y acá la segunda polémica. Hay opiniones encontradas respecto a si el señuelo debe posicionarse sobre el agua totalmente horizontal o inclinado de cola.

Discusión que resolveremos de la misma forma que la primera: personalmente le hago una pollera que le brinde cierta  flotación trasera al artilugio, de forma tal que quede posado casi perfectamente horizontal sobre el agua, equilibrando el efecto del  contrapeso, pero manteniendo una muy sutil inclinación trasera. Traduciendo a una unidad de medida comparativa,  dicha inclinación resultaría algo así como tres pendejésimas hacia  la parte posterior.

Con tal fin, uso un material con buena flotabilidad, en este caso, goma eva. Cortamos tiras finas de unos diez centímetros de largo y las unimos mediante un rezago de multifilamento, tomando la precaución dejar un excedente de éste para luego atar todo el conjunto en el soporte de la toma trasera de la rana, el cual habíamos previsto con anterioridad. Si bien la goma Eva brinda mucha flotabilidad, tiene escaso movimiento en el agua, por lo tanto si queremos darle más "vida" al artesanal, podemos agregarle un trocito de gomas sacadas de soga elástica.  Ensamblamos el conjunto, agregamos el anzuelo, doble fijo o triple adaptado a doble con anilla, depende de la posición de la toma.

Es conveniente tomar esta decisión con anterioridad, no como en mí caso que quería ponerle doble fijo y por una distracción hice la toma al revés, macana que solucione con el señuelo ya terminado. Si bien el anzuelo ya está en posición anti-enganche, conviene ponerle un alambre fino que oficie de anti enganche, en este caso le puse de cobre, pero puede ser inoxidable fino o también el alambresito que viene cerrando el paquete de pan lactal. 

Para finalizar, calibraremos el señuelo. Para eso es necesario concurrir a un espejo de agua amplio. Más amplio que el fuentón de lavarse las patas o la bañera. Al hacerlo trabajar en un ámbito real de pesca, pueden llegar a surgir algunos inconvenientes que harán que el artesanal no funcione correctamente de acuerdo a como estaba planeado.

Y con el problema, la solución, decía la abuela.

Si al nadar tiende a profundizar de boca, como queriendo popear, es porque es muy liviano de cola. Con una tijera se recortan un poco los flecos de goma Eva y se repite la prueba hasta que se le quite ese feo vicio!

Si en cambio su natación es completamente sin vida y viene como asomando el hocico, o incluso desliza como una Moss boss defectuosa, es porque está muy pesado de cola. Agréguele más flecos de goma eva y repita la prueba hasta que se le quite ese feo vicio!

Por último, si al nadar se gira y viene panza arriba; si repitió los pasos anteriores y así y todo se niega a saltar; si se hunde completamente o nada de costado; o si realiza otra acción distinta a la de específica  y no le encuentra solución; arroje el señuelo a la remismísima basura y váyase a comprar una rana de goma. No reniegue más al pedo! 

Para cerrar la nota abundo con una captura lograda por el amigo Gabriel Pinciroli con uno de estos Jumping.

A  modo de pos-data

Quisiera en este último párrafo agradecer muy profundamente al señor Telmo Abadía por invitarme a participar de su blog. En el escaso par de años que llevo como aspirante a artesano de señuelos, he confiado en este espacio como fuente de consulta permanente, buscando una solución, mejorando algún aspecto técnico, copiando un trabajo, aprendiendo.

Por lo tanto, he tomado este convite con la misma alegría y satisfacción que si Dante Quinterno me hubiese permitido guionar una mensual de "Andanzas de Patoruzú".

Con el mister nos hemos visto personalmente sólo un par de veces,  y hasta el día de la fecha nos debemos  la satisfacción de una pesca compartida.

Sin embargo ya lo tengo junado. Persona de inmensa calidad y calidez, amigo generoso y de gran paciencia; maniático obsesivo de las cosas bien hechas; eximio artesano. Excelente pescador, según su propia definición de la cual desconfío; crónico arrebatador de carnes asadas y pésimo constructor de hornos de barro. (No porque sea tu blog me vas a obligar a mentir!).

Gracias Telmo por permitirme formar parte de éste, tu espacio, confiando en mis escasas habilidades de artesano, incluso más de lo que yo mismo confío. Espero haber estado a la altura de tus expectativas.

Buena pesca!